La contabilidad, como motor fundamental de la gestión empresarial, desempeña un papel crucial al procesar las operaciones de una entidad y condensar datos esenciales para la toma de decisiones tanto internas como externas. Este proceso se cristaliza en los estados financieros, presentados no solo como un resumen de aspectos financieros críticos para la entidad, sino también como un medio para compartir información con terceros interesados en su desarrollo.
El propósito fundamental de los estados financieros se origina en la necesidad de información, una demanda proveniente tanto de inversionistas y acreedores como de diversos actores en economías en desarrollo o evolucionadas, incluyendo al público en general. El usuario general de la información financiera, un conglomerado diverso que incluye desde miembros internos hasta analistas financieros y autoridades regulatorias, requiere una presentación clara y concisa de la situación financiera y resultados de operación de la entidad.
En este contexto de evolución constante, la información financiera ha experimentado una transformación significativa, pasando de balances simplificados a conjuntos integrados de estados financieros y notas complementarias. Aunque gran parte de la información financiera se genera como herramienta administrativa, los estados financieros básicos se destacan como esenciales para que el usuario general pueda formar sus propias conclusiones sobre el cumplimiento de objetivos de la entidad.
Esta evolución y diversificación de la información financiera sitúa a emisores de normas, reguladores y entidades en la responsabilidad conjunta de definir qué tipo de información esencial debe proporcionarse al usuario general. Este proceso requiere una adaptabilidad considerando las circunstancias específicas de cada entidad y las características cambiantes de su entorno económico. Así, la información financiera se mantiene en constante evolución, alineándose con las demandas del entorno y las necesidades de los diversos interesados.
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ToggleOrigen y aprobación de la NIF A-3
El propósito primordial de esta normativa es identificar las necesidades de los usuarios y, a partir de estas, establecer los objetivos concretos de los estados financieros de las entidades. Además, busca delinear las características y limitaciones inherentes a estos estados financieros. La aprobación unánime de la NIF A-3 para su emisión se llevó a cabo en septiembre de 2005 por el Consejo Emisor del CINIF, siendo publicada en octubre de ese mismo año. Su implementación oficial se estableció para los ejercicios que se iniciaran a partir del 1 de enero de 2006.
Razones para emitir la NIF A-3
El Consejo Mexicano de Normas de Información Financiera (CINIF) ha decidido consolidar los objetivos de los estados financieros, tanto para entidades con propósitos lucrativos como no lucrativos, dentro de la serie NIF A. Esta serie, que constituye el marco conceptual normativo, sirve como base para el desarrollo de normas específicas de información financiera para diversas entidades.
La convergencia de los objetivos de los estados financieros se fundamenta en la observación de mayores similitudes que discrepancias entre la información generada por entidades con y sin fines lucrativos. Este enfoque unificado se presenta en un solo documento normativo, independientemente del tipo de entidad.
Se reconoce que las entidades patrocinadas por el gobierno, como hospitales, escuelas o servicios, comparten en gran medida objetivos similares a los descritos en esta normativa. Sin embargo, se sugiere un análisis más detallado de las disposiciones normativas específicas para el sector gubernamental.
La lógica subyacente es que, aunque la información financiera puede abarcar más allá de lo especificado en los estados financieros, los objetivos fundamentales son los mismos. Por ello, se considera válido establecer inicialmente los objetivos de los estados financieros, basándose en las necesidades de los usuarios. Posteriormente, se determinan las características y limitaciones de estos estados financieros, definiendo así su alcance en relación con la información financiera en general.
Objetivo de la NIF A-3
Esta Norma tiene como finalidad identificar las necesidades de los usuarios y establecer, con base en las mismas, los objetivos de los estados financieros de las entidades; así como las características y limitaciones de los estados financieros.
Alcance de la NIF A-3
Las disposiciones de esta Norma de Información Financiera son aplicables para todo tipo de entidades. Si bien la norma pareciera estar dirigida a entidades lucrativas, en su esencia la normatividad también es aplicable a entidades con propósitos no lucrativos. Dado que ambas tienen ciertas diferencias en sus características particulares, al final de la presente NIF, se describen algunas necesidades y limitaciones que son específicas para las entidades que no persiguen fines de lucro.
Por otro lado, aun cuando no existe evidencia de que los objetivos de los estados financieros previstos en esta NIF, sean inadecuados para la emisión de información financiera de carácter externo por parte de entidades del sector gubernamental, es necesario un estudio para definir las características propias de dichas entidades y, con base en ello, definir la normatividad contable apropiada. En tanto se establece dicho marco normativo, cualquier entidad que deba o tome la decisión de acogerse a esta normatividad debe cumplir con todo lo dispuesto en la misma.
Definición de términos de la NIF A-3
Las definiciones utilizadas en esta NIF son las siguientes:
a) Entidad lucrativa – Es aquella unidad identificable que realiza actividades económicas, constituida por combinaciones de recursos humanos, materiales y financieros (conjunto integrado de actividades económicas y recursos), conducidos y administrados por una autoridad que toma decisiones encaminadas a la consecución de los fines de lucro de la entidad, siendo su principal atributo, la intención de resarcir y retribuir a los inversionistas su inversión, a través de reembolsos o rendimientos.
b) Entidad con propósitos no lucrativos – Es aquella unidad identificable que realiza actividades económicas, constituida por la combinación de recursos humanos, materiales y financieros, coordinados por una autoridad que toma decisiones encaminadas a la consecución de los fines para los que fue creada, y que no resarce económicamente a sus donantes. La entidad con propósitos no lucrativos tiene las siguientes características:
- Lleva a cabo transacciones no recíprocas por las cuales obtiene recursos de donantes que no reciben en contraprestación pagos o beneficios económicos;
- Sus actividades de prestación de servicios, producción o venta de bienes persiguen cubrir, directa o indirectamente, fines de carácter social1 ;
- No existe participación definida de propietario que pueda ser vendida, transferida o redimida, o que pueda transmitir derechos a la distribución residual de recursos en el caso de liquidación de la entidad. Al no existir propietarios, no hay operaciones como la emisión y redención de acciones o partes sociales y pago de dividendos, utilidades o remanentes.
c) Usuario general – Es cualquier ente involucrado en la actividad económica (sujeto económico), presente o potencial, interesado en la ‘información financiera’ de las entidades, para que en función a ella base su toma de decisiones.
Necesidades de los usuarios en la NIF A-3
La actividad económica es el punto de partida para la identificación de las necesidades de los usuarios, dado que ésta se materializa a través del intercambio de objetos económicos entre los distintos sujetos que participan en ella. Dichos objetos se identifican con los diferentes bienes, servicios y obligaciones susceptibles de intercambio.
El usuario general destina sus recursos, comúnmente en efectivo, a consumos, ahorros y decisiones de inversión, donación o préstamo, para lo cual requiere de herramientas para su toma de decisiones. La información financiera es en sí, una herramienta esencial para la toma de decisiones por parte del sujeto económico (usuario general). Al respecto, el usuario general de la información financiera puede clasificarse de manera significativa en los siguientes grupos:
a) Accionistas o dueños – incluye a socios, asociados y miembros, que proporcionan recursos a la entidad que son directa y proporcionalmente compensados de acuerdo a sus aportaciones (entidades lucrativas).
b) Patrocinadores – incluye a patronos, donantes, asociados y miembros, que proporcionan recursos que no son directamente compensados (entidades con propósitos no lucrativos).
c) Órganos de supervisión y vigilancia corporativos, internos o externos – son los responsables de supervisar y evaluar la administración de las entidades.
d) Administradores – son los responsables de cumplir con el mandato de los cuerpos de gobierno (incluidos los patrocinadores o accionistas) y de dirigir las actividades operativas.
e) Proveedores – son los que proporcionan bienes y servicios para la operación de la entidad.
f) Acreedores – incluye a instituciones financieras y otro tipo de acreedores.
g) Empleados – son los que laboran para la entidad.
h) Clientes y beneficiarios – son los que reciben servicios o productos de las entidades.
i) Unidades gubernamentales – son las responsables de establecer políticas económicas, monetarias y fiscales, así como participar en la actividad económica al conseguir financiamientos y asignar presupuesto gubernamental.
j) Contribuyentes de impuestos – son aquéllos que fundamentalmente aportan al fisco y están interesados en la actuación y rendición de cuentas de las unidades gubernamentales.
k) Organismos reguladores – son los encargados de regular, promover y vigilar los mercados financieros.
l) Otros usuarios – incluye a otros interesados no comprendidos en los apartados anteriores, tales como público inversionista, analistas financieros y consultores.
Objetivos de los estados financieros en la NIF A-3
La información financiera es cualquier tipo de declaración que exprese la posición y desempeño financiero de una entidad, siendo su objetivo esencial ser de utilidad al usuario general en la toma de sus decisiones económicas. Los objetivos de los estados financieros se derivan principalmente de las necesidades del usuario general, las cuales a su vez dependen significativamente de la naturaleza de las actividades de la entidad y de la relación que dicho usuario tenga con ésta. Sin embargo, los estados financieros no son un fin en sí mismos, dado que no persiguen el tratar de convencer al lector de un cierto punto de vista o de la validez de una posición; más bien, son un medio útil para la toma de decisiones económicas en el análisis de alternativas para optimizar el uso adecuado de los recursos de la entidad.
Dichos objetivos, en consecuencia, están determinados por las características del entorno económico en que se desenvuelve la entidad, debiendo mantener un adecuado nivel de congruencia con el mismo. Tal entorno determina y configura las necesidades del usuario general de la información financiera y, por ende, constituye el punto de partida básico para el establecimiento de los objetivos de los estados financieros.
Por consiguiente, considerando las necesidades comunes del usuario general, los estados financieros deben serle útiles para:
- Tomar decisiones de inversión o asignación de recursos a las entidades. Los principales interesados al respecto son quienes puedan aportar capital o que realizan aportaciones, contribuciones o donaciones a la entidad. El grupo de inversionistas o patrocinadores está interesado en evaluar la capacidad de crecimiento y estabilidad de la entidad y su rentabilidad, con el fin de asegurar su inversión, obtener un rendimiento y recuperar la inversión o, en su caso, proporcionar servicios y lograr sus fines sociales.
- Tomar decisiones de otorgar crédito por parte de los proveedores y acreedores que esperan una retribución justa por la asignación de recursos o créditos. Los acreedores requieren para la toma de sus decisiones, información financiera que puedan comparar con la de otras entidades y de la misma entidad en diferentes periodos. Su interés se ubica en la evaluación de la solvencia y liquidez de la entidad, su grado de endeudamiento y la capacidad de generar flujos de efectivo suficientes para cubrir los intereses y recuperar sus inversiones o crédito
- Evaluar la capacidad de la entidad para generar recursos o ingresos por sus actividades operativas
- Distinguir el origen y las características de los recursos financieros de la entidad, así como el rendimiento de los mismos. En este aspecto el interés es general, pues todos están interesados en conocer de qué recursos financieros dispone la entidad para llevar a cabo sus fines, cómo los obtuvo, cómo los aplicó y, finalmente, qué rendimiento ha tenido y puede esperar de ellos
- Formarse un juicio de cómo se ha manejado la entidad y evaluar la gestión de la administración, a través de un diagnóstico integral que permita conocer la rentabilidad, solvencia y capacidad de crecimiento de la entidad para formarse un juicio de cómo y en qué medida ha venido cumpliendo sus objetivos.
- Conocer de la entidad, entre otras cosas, su capacidad de crecimiento, la generación y aplicación del flujo de efectivo, su productividad, los cambios en sus recursos y en sus obligaciones, el desempeño de la administración, su capacidad para mantener el capital contable o patrimonio contable, el potencial para continuar operando en condiciones normales, la facultad para cumplir su responsabilidad social a un nivel satisfactorio.
Estados financieros en la NIF A-3
Los estados financieros son la manifestación fundamental de la información financiera; son la representación estructurada de la situación y desarrollo financiero de una entidad a una fecha determinada o por un periodo definido. Su propósito general es proveer información de una entidad acerca de su posición financiera, del resultado de sus operaciones y los cambios en su capital contable o patrimonio contable y en sus recursos o fuentes, que son útiles al usuario general en el proceso de la toma de sus decisiones económicas. Los estados financieros también muestran los resultados del manejo de los recursos encomendados a la administración de la entidad, por lo que, para satisfacer ese objetivo, deben proveer información sobre la evolución de:
- Los activos
- Los pasivos
- El capital contable o patrimonio contable
- Los ingresos y costos o gastos
- Los cambios en el capital contable o patrimonio contable
- Los flujos de efectivo o, en su caso, los cambios en la situación financiera.
Esta información asociada con la provista en las notas a los estados financieros, asiste al usuario de los estados financieros para anticipar las necesidades o generación de flujos de efectivo futuros de la entidad, en particular, sobre su periodicidad y certidumbre. Aunque los objetivos de los estados financieros y de la información financiera son los mismos, ciertos datos útiles van más allá del contenido de los estados financieros, por lo que sólo pueden ser suministrados, por medio de informes distintos. Dicha información, incluida en los informes anuales corporativos, en prospectos de colocación de deuda o capital, o en informes a las bolsas de valores, puede asumir diversos modos y referirse a varios asuntos; tales como, los comunicados de prensa, las proyecciones u otras descripciones de planes o expectativas de la administración y los informes de la gerencia y del consejo de administración.
Estados financieros básicos en la NIF A-3
Los estados financieros básicos que responden a las necesidades comunes del usuario general y a los objetivos de los estados financieros, son:
- El estado de situación financiera, también llamado estado de posición financiera o balance general, que muestra información relativa a una fecha determinada sobre los recursos y obligaciones financieros de la entidad; por consiguiente, los activos en orden de su disponibilidad, revelando sus restricciones; los pasivos atendiendo a su exigibilidad, revelando sus riesgos financieros; así como, el capital contable o patrimonio contable a dicha fecha.
- El estado de resultado integral (presentado en uno o en dos estados, según lo establece la NIF particular relativa al tema), para entidades lucrativas o, en su caso, estado de actividades, para entidades con propósitos no lucrativos, que muestra la información relativa al resultado de sus operaciones en un periodo y, por ende, de los ingresos, gastos; así como de la utilidad (pérdida) neta o cambio neto en el patrimonio contable resultante en el periodo.
- El estado de cambios en el capital contable, en el caso de entidades lucrativas, que muestra los cambios en la inversión de los propietarios durante el periodo.
- El estado de flujos de efectivo o, en su caso, el estado de cambios en la situación financiera, que indica información acerca de los cambios en los recursos y las fuentes de financiamiento de la entidad en el periodo, clasificados por actividades de operación, de inversión y de financiamiento. La entidad debe emitir uno de los dos estados, atendiendo a lo establecido en normas particulares.3 Las notas a los estados financieros son parte integrante de los mismos y su objeto es complementar los estados básicos con información relevante. Los estados financieros tienden progresivamente a incrementar su ámbito de acción, aspirando a satisfacer las necesidades del usuario general más ampliamente.
Diferencias entre las entidades lucrativas y las entidades con propósitos no lucrativos en la NIF A-3
En una entidad con propósitos no lucrativos los patrocinadores (patronos, donantes, asociados, miembros) no reciben una retribución económica por sus aportaciones. Sus expectativas son el cumplimiento de los objetivos de la entidad y el mantenimiento del patrimonio contable de la misma, como condición necesaria para que la entidad pueda realizar sus actividades de manera continua en el tiempo.
En una entidad lucrativa los accionistas aportan recursos a cambio de una retribución económica en forma de dividendos, aumentos de valor en su capital contable o en el reembolso de sus aportaciones. Sus expectativas se centran en maximizar el valor de sus aportaciones y la esperanza de obtener utilidades.
Los patrocinadores de entidades con propósitos no lucrativos aportan recursos por razones de beneficencia, ya sea caritativas, humanitarias, culturales, científicas u otro orden de carácter social sin perseguir fines de lucro; esperando que sus objetivos sean cumplidos eficientemente por la entidad no lucrativa. Esto no necesariamente implica que no puedan esperar un rendimiento; sin embargo, éste se destina íntegro a la consecución de sus fines de carácter social.
Por el contrario, los inversionistas de las entidades lucrativas aportan recursos con el fin de obtener un rendimiento o al menos resarcir total o parcialmente su inversión, independientemente de que los objetivos para la constitución de la entidad establezcan desempeñar actividades caritativas, humanitarias, culturales, científicas o de otro orden de carácter social.
Las organizaciones con fines no lucrativos normalmente proporcionan bienes y servicios a precios iguales o más bajos que su costo y, en ocasiones, sin cargo alguno, a pesar de que algunas organizaciones no lucrativas proporcionen alguno o algunos de sus productos o servicios a precios superiores a su costo. Sin embargo, se espera que los costos no cubiertos por la prestación de bienes o servicios del ente con propósitos no lucrativos, se cubran con las contribuciones o donaciones obtenidas por la entidad.
Por consiguiente, los recursos de las entidades con propósitos no lucrativos se integran de los ingresos que obtienen por la venta de bienes y servicios, más los recursos obtenidos como cuotas de los miembros del ente, donaciones y contribuciones recibidas de otras entidades, las cuales aumentan su activo neto. Las entidades con fines no lucrativos obtienen donaciones importantes sin cargo alguno, por concepto de servicios de voluntarios, aportaciones en especie o, por la utilización gratuita de activos de ciertos patrocinadores con permiso de los mismos.
Semejanzas entre las entidades lucrativas y las entidades con propósitos no lucrativos en la NIF A-3
Las organizaciones con fines no lucrativos al igual que los entes lucrativos, generalmente, obtienen en el mercado mano de obra, inventarios, equipos e instalaciones que se liquidan al contado o a crédito. Los costos y gastos cubiertos por la entidad con propósitos no lucrativos por la venta de productos o servicios, costos y gastos de mantenimiento de los activos, así como, la depreciación, amortización, deterioro o agotamiento y el costo financiero de las deudas asumidas, constituyen una disminución de sus activos netos, igual que en los negocios lucrativos.
Las organizaciones con fines no lucrativos pueden obtener recursos a través de préstamos de bancos, hipotecas y pueden emitir otros instrumentos financieros de deuda, igual que los entes lucrativos. Los niveles de eficiencia operativa, solvencia, liquidez y riesgo financiero; así como el análisis sobre su capacidad financiera, la generación y aplicación de flujos de efectivo, desempeño de la administración, cambios en sus recursos y obligaciones, capacidad para mantener el nivel de inversión, el potencial para continuar operando y la facultad de cumplir con su responsabilidad social, son de vital importancia tanto en una entidad lucrativa como en una organización con fines no lucrativos.
CPCON como socio estratégico en el cumplimiento de la NIF A-3: Necesidades de los usuarios y objetivos de los estados financieros
CPCON, como socio estratégico, desempeña un papel fundamental en la comprensión y ejecución del cumplimiento de la NIF A-3: Necesidades de los usuarios y objetivos de los estados financieros. Su enfoque se centra en brindar apoyo experto y soluciones específicas que permiten a las entidades cumplir eficazmente con esta normativa contable.
CPCON actúa como guía para comprender a fondo las necesidades de los usuarios de la información financiera, identificando las expectativas clave y los requerimientos específicos de los distintos grupos de interés. Además, ofrece asesoramiento estratégico para alinear los objetivos financieros de la entidad con las directrices establecidas por la normativa, optimizando así la presentación de los estados financieros.
El papel de CPCON implica la implementación de prácticas y procesos que garanticen la satisfacción de los requisitos de la NIF A-3. Proporciona orientación detallada para delinear los objetivos fundamentales de los estados financieros, asegurando que estos reflejen con precisión la información necesaria para la toma de decisiones internas y externas.
Además, CPCON se compromete a mantenerse actualizado con las modificaciones normativas y brindar un soporte continuo para adaptarse a los cambios, asegurando que la entidad cumpla de manera integral y efectiva con la normativa.
Preguntas frecuentes referentes a la NIF A-3: Necesidades de los usuarios y objetivos de los estados financieros
¿Cuál es el propósito de la NIF A-3 en el contexto contable?
La norma tiene como finalidad establecer un marco conceptual para comprender las necesidades específicas de los usuarios de la información financiera y alinear los objetivos de los estados financieros con esas expectativas.
¿Qué aspectos abarcan las necesidades de los usuarios según la NIF A-3?
La norma considera las expectativas y requisitos de diversos interesados, como inversionistas, acreedores, organismos gubernamentales, analistas financieros, entre otros, identificando las características de la información que estos grupos necesitan para tomar decisiones informadas.
¿Cuáles son los objetivos fundamentales de los estados financieros según la NIF A-3?
Los objetivos principales incluyen presentar información que sea confiable, relevante, comprensible, comparable y que ayude a la toma de decisiones económicas de los usuarios.
¿Cómo se determinan las características y limitaciones de los estados financieros en la normativa?
La norma establece que las características y limitaciones de los estados financieros se derivan de las necesidades de los usuarios, definiendo el alcance y la naturaleza de la información que estos deben presentar.
¿Qué tipo de entidades deben seguir la NIF A-3?
La NIF A-3 es aplicable a entidades lucrativas y no lucrativas, proporcionando un marco conceptual para la preparación y presentación de información financiera.